PABELLÓN DE LOS DESCUBRIMIENTOS Y CINE ESPACIAL OMNIMAX

Arquitecto: Javier Feduchi.

El Pabellón de los Descubrimientos, con la máquina de vapor en primer plano

El que fuera Pabellón de los Descubrimientos, estuvo ubicado en la zona sur de la Isla de la Cartuja, frente al pabellón de la Navegación y junto a la que fue Puerta Triana, en el Camino de los Descubrimientos.

El que iba a ser el buque insignia de la Exposición Universal, nació como un proyecto permanente, pensando en su conversión en museo o lugar de ocio tras aquellos meses de 1992. El proyecto definitivo constó de una única estructura funcional que, en realidad, funcionaba como dos edificios independientes: el Domorama, y el pabellón de exposiciones.

El diseño del edificio es el de un rectángulo de aluminio de 126 x 66 metros de planta, donde 15 torres estructurales metálicas, separadas 24 metros entre sí, se unen mediante estructuras de gran tamaño (puentes), dejando libres ocho espacios vanos entre las torres.



El pabellón en 1992 con "Los Deshollinadores". Se pueden observar los daños del incendio en el techo.
Fuente: Esa Sevilla

 La peculiaridad del pabellón fue que, el asentamiento del edificio se concibió como un espacio abierto, de uso, entre el suelo y el primer forjado. siendo un nivel 3 metros inferior al nivel de la calle.


"El Deshollinador de la Cartuja"
Su historia es bastante lamentable: Todo empezó el día 18 de febrero de 1992, dos meses antes de la inauguración de la Exposición Universal, cuando una insignificante chispa hizo que el pabellón quedara envuelto en llamas en cuestión de minutos. Un incendio de tres horas de duración que destruyó todos los contenidos de su interior, entre los que se encontraban piezas tan valiosas como  el primer coche fabricado en España o el avión del Barón Rojo, y del que solo se salvó el edificio que albergaba el Cine Espacial Alcatel, que tuvo un gran éxito durante los 6 meses que duró la Muestra.

Dicho cine fue utilizado durante unos años en el parque temático 'Cartuja. El Parque de los Descubrimientos' y en el Espacio Cultural Puerta Triana a finales de los 90 pero, finalmente, fue cerrado y en el verano de 2005 la empresa canadiense IMAX, responsable del innovador formato de cine que se usó en la Exposición, se llevó el proyector, ya que se encontraba en régimen de alquiler.

La parte correspondiente al edificio expositivo, fue cubierta de forma original por el escultor Eduardo Arroyo, con las siluetas de unos deshollinadores con escaleras, haciendo clara alusión al incendio provocado poco tiempo antes, y como forma de "disimular" mínimamente el destrozo que el fuego ocasionó en las fachadas exteriores. Como esta obra era efímera, se dio al autor la oportunidad de crear una obra de menor tamaño y carácter permanente: Arroyo creó la escultura "El Deshollinador de la Cartuja", situada en los jardines del Edificio Expo (Antiguo World Trade Center), frente al Pabellón de los Descubrimientos.


Pero la historia del pabellón no terminó ahí. En la zona del sótano, ya diáfano, se instaló una discoteca que estuvo abierto durante la Expo '92, como aprovechamiento del espacio y cubriendo las paredes para que los visitantes no vieran los estragos que el incendio provocó en el interior. La discoteca estuvo funcionando hasta la demolición del edificio en 2007 y desde 1997 como discoteca de música electrónica.


Cine Espacial Alcatel (Omnimax)


 En cuanto a la parte expositiva del edificio, se puede decir que ha estado durante varias décadas en el olvido. 

En septiembre del año 2005 se plantearon dos proyectos que determinarían el futuro del edificio: uno era el del propio arquitecto, Javier Feduchi Benlliure, que pretendía reutilizar el cine y convertir el edificio en un lugar de ocio. La otra propuesta era demoler el pabellón y aprovechar la parcela para edificar un enorme rascacielos de 150 metros de altura.

El segundo proyecto resultó ser el más votado y, finalmente, en enero de 2006 comenzaron las obras de desmontaje, comenzando por la fachada norte y terminando por la esfera del cine Omnimax en marzo del mismo año.

Las protestas de los sevillanos no sirvieron para nada y, Sevilla, una vez más, perdía otro elemento más de tan interesante patrimonio que se nos dejó.

En las siguientes fotos, se aprecian las diferentes etapas del desmontaje del pabellón:

El edificio, antes de que comenzaran las tareas de desmontaje
Desmontaje de la fachada sur
Desmontaje de la fachada norte

Parcela libre

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