PABELLÓN DE TAILANDIA

Arquitecto: Prajade Thiravat

El pabellón de Tailandia se encontraba situado en la Avenida Uno o del Agua, actual calle Tomas Alba Edison, junto a los pabellones de Singapur, Malasia e Indonesia, conformando una pequeña plaza junto a los pabellones de la Asean (Asociaciones de Naciones del Sureste Asiático).

El edificio que representó a este pequeño país asiático se inspiró en la arquitectura del Palacio Thai y la llamada Montaña Dorada, incluyendo una terraza en las que se desarrollaban ceremonias de la cultura tailandesa. Con una planta circular y cuatro plantas, el pabellón tailandés se construyó sobre una parcela de 677 metros cuadrados, donde se destinaron 385 de ellos a zona expositiva.

La fachada, similar a la de una pagoda, estaba resaltada por una pérgola y un porche de estilo oriental. En la zona superior del edificio, que permanecía al aire libre, se encontraba una réplica de parte del Templo Dorado de Bangkok.

En la entrada se situaban las dos tiendas del pabellón: una dedicada exclusivamente a los productos de seda como cordobatas, pañuelos o flores y la otra donde se ofrecían artículos de artesanía típica del país: muñecas de madera, pendientes, pulseras, cerámica, así como postales de todos los murales expuestos en el pabellón.

La primera planta expositiva mostraba al visitante el desarrollo de las relaciones diplomáticas y comerciales con el mundo occidental en sus primeras etapas, a través de grandes murales hechos a mano. En representación de la Tailandia antigua se ubicaba en el centro de la sala la proa de un barco antiguo con un baño de oro, así como piezas arqueológicas rescatadas del fondo del mar.

En la segunda planta se mostraba la Tailandia actual y su cambio desde la antigüedad mediante murales de dos metros y medio de alto por uno de ancho donde se plasmaban las relaciones internacionales del país. En este segundo espacio expositivo se podía ver la proa de un transatlántico, rodeada de productos de exportación: comida, ropa, electrodomésticos, etc.

El recorrido continúa en la tercera planta, donde se proyecta un vídeo llamado "El descubrimiento de Tailandia", de siete minutos de duración y proyectado simultáneamente en diecisiete pantallas.

Finalmente, y como el resto de pabellones asiáticos que le rodeaban de carácter efímeros, fue derribado tras el cierre de la Muestra en el primer mes de 1993.

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